viernes, 18 de junio de 2010

A distancia...

Hoy, en el alféizar de mi ventana, confundo el silencio de la noche y el canto de los grillos con esta ausencia tuya a distancia…

Que inmensa tranquilidad va con el frío viento esta noche (de las primeras de abril, ahora últimas), donde todo habla de ti; el cielo pelón de estrellas, sólo destaca la bella luna y por medio de un laberinto de túnel, me voy en un sueño a buscar la hermosa mirada apagada que me conquista cada instante que cruza con tus ojos.

Y en medio de este conmovedor vacío, van falleciendo las luces de la cuadra entera, donde ahora brota la oscuridad y sólo queda un destello imaginado sobre el cual se encuentra tu luz incrustada en un gran pedazo de mi aura translúcida; vas llenando cada segundo en el que mi voz repite tu nombre, ¡¡que poder el tuyo!! De no bajar un segundo, ni por vía marítima donde te hundes convertido en submarino veloz.

Pero no sirve de nada maldecir un mínimo porcentaje de algo, ahora abrazo este instante que más tarde estará distante, se habrá extinguido, más volverá cuando sienta venir el estrépito de tu presencia que hará temblar el suelo y volteará mis pasos a ese abismo de sueños inagotables que tan solo parpadean sin dejar de brillar…